EL TAO
Se le mira, y no se le ve:
su Nombre es Esencia.
Se le intenta escuchar, pero no se lo oye:
su Nombre es Sutil.
se le intenta coger, pero no se le siente:
su Nombre es Pequeño.
Estos tres son inseparables, porque mezclados son uno.
En su parte superior no hay luz
En su parte inferior no hay oscuridad
Fluyendo sin cesar
se le puede nombrar.
Regresa a la nada
Es la figura sin aspecto,
es el dibujo sin forma:
es el Oscuro Caos
Al encontrártelo no le ves el rostro,
por lo tanto tampoco la espalda.
Cuando te basas en el antiguo Tao,
dominas el ser de hoy.
Así conoces el viejo principio
Es decir: el hilo atravesando el Tao
Capítulo XIV del "Tao Te King"
imagen: Nebulosa Andrómeda
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