Hoy como ayer

El fragmento de texto que abajo transcribimos fue escrito, al parecer,  hace aproximadamente unos 3800 años, durante la XII dinastía de Egipto (La Dinastía XII transcurre de  a.C. 1980 a 1790 a. C., y junto con la época final de la dinastía XI, forma parte del Imperio Medio en la historia del Antiguo Egipto.)
El texto de  "El diálogo de un desesperado con su alma"   se encuentra en un manuscrito, el papiro de Berlín 3.024, que ha sido fechado en la dinastía XII. La primera parte del documento ha desaparecido y el texto que ha llegado a nosotros está escrito en 155 columnas verticales inscritas de derecha a izquierda.

El segundo poema que aquí presentamos  fue tomado del blog "Nuestros Antepasados"
http://antepasadosnuestros.blogspot.com.ar/ y nos pareció de rigurosa actualidad, pues muchas de las reflexiones que se encuentran en el poema bien podrían estar en la boca de cualquiera de los ciudadanos de nuestro globalizado mundo

Diálogo de un desesperado con su alma 

Segundo poema

 

 

¿A quién hablaré hoy?
Los hermanos se han vuelto malvados
y  los amigos de hoy no aman.

¿A quién hablaré hoy?
Los corazones son avaros
y cualquiera toma posesión de  los bienes de su prójimo.
 la clemencia desapareció
y la violencia se transmite a todos.

 ¿ A quién hablaré hoy?
Se encuentra satisfacción en el mal
y  se abandona lo bueno en cualquier lugar.

¿A quién hablaré ] hoy?
Quien hacía encolerizar a un hombre por sus malas acciones,
ahora  hace reír a todos cuando su maldad es perniciosa.

¿A quien hablaré hoy?
Se desvalija
y cualquiera toma posesión de lo de su prójimo.

 ¿A quién hablaré hoy?
El malhechor es  un íntimo
y el hermano con quien se actuaba se ha convertido  en un
enemigo.

¿A quien hablaré hoy?
Nadie quiere recordar el pasado
 y nadie quiere ayudar a quien actúa ahora.

¿A quien hablaré hoy?
 Los hermanos se han vuelto malvados
y se recurre a los extranjeros para el afecto.

¿A quién hablaré hoy?
Los rostros  se ocultaron
y todos están más abatidos que su  su prójimo.

¿A quién hablaré hoy?
Los corazones se han vuelto avariciosos
 y no existe corazón humano en el se pueda confiar.

¿A quién hablaré  hoy?
No hay hombres justos
y la tierra quedó abandonada a los que hicieron el mal.

¿A quién hablaré hoy?
Se carece  de amigo íntimo
y se recurre a quien se desconoce  para lamentarse.

¿A quién hablaré hoy?
No hay quien  esté satisfecho
y ese con quien se iba, no existe.

 ¿A quién hablaré hoy?
Estoy agobiado cargando penurias
por carecer de un íntimo amigo.

 ¿A quién hablaré hoy?
La maldad vagó por la tierra
 y no tiene fin.

 

 

 

(extractado de "Nuestros Antepasados" )